Esta es la historia de cinco extraterrestres que se perdieron en algún lugar del universo. Estos cinco extraterrestres salieron de su pequeño planeta con una misión: encontrar un nuevo mundo para emigrar, pues el suyo estaba a punto de quedar inservible.
Los cinco extraterrestres fueron elegidos entre los más inteligentes y fuertes. Fueron entrenados y, cuando estuvieron listos, se pusieron en marcha.
-El viaje será duro, pero confiamos en vosotros -les había dicho el líder de su planeta.
Al principio todo iba bien, hasta que surgió el primer problema. El extraterrestre que estaba pilotando la nave se quedó dormido y no se dio cuenta de que se acercaba a un pequeño meteorito. Era realmente pequeño, pero lo suficiente como para dañar la nave si se chocaban. Y se chocaron.
Los otros cuatro extraterrestres, al sentir el impacto, fueron al puente de mando a ver qué pasaba.
Y así empezaron a discutir. Que si la culpa es tuya por quedarte dormido... Que no, que es vuestra por no dejarme dormir... Que no, que es de este porque con sus ronquidos no hay quien duerma...
Estuvieron discutiendo durante mucho tiempo. Hasta que uno de los extraterrestres se dio cuenta de que se acercaban a un satélite.
-¡Rápido, rápido! ¡Que nos estrellamos!
A punto estuvieron de hacerlo. Pero consiguieron dominar la nave y aterrizar.
-Y ahora, ¿qué hacemos? -preguntó uno.
-Habrá que reparar la nave -dijo otro.
Como estaban muy enfadados los unos con los otros empezaron a trabajar sin hablar más. Cada uno se puso con lo que le pareció.
Tal fue el embrollo que se formó que terminaron haciendo un agujero todavía más grande, rompiendo el tanque de combustible, estropeando la antena de transmisiones y provocando un cortocircuito en los mandos de navegación.
Discutieron y discutieron, echándose la culpa los unos a los otros. Pero sin aportar ni una sola idea que les ayudara a encontrar la forma de salir de allí. Y así estuvieron durante días.
Menos mal que llegó otra nave poco tiempo después y los rescató.
-
Con el impacto llegó una señal de socorro automática del sistema -dijo uno de los extraterrestres que fue al rescate.
Los extraterrestres se sentían muy avergonzados. No se habían acordado de la señal de rescate. Estaban tan preocupados de buscar culpables que no se pararon a pesar que lo verdaderamente importante era cumplir con su responsabilidad de salvar a los demás, a pesar de los problemas.
Y lo peor es que se tuvieron que quedar todavía varios días allí, porque su nave estaba inservible y en la de rescate no había espacio para nadie más.
Tiempo después mandaron otra nave al espacio en busca de un nuevo planeta. Si lo encuentran, esperemos que lo cuiden mejor que el primero y así no tenga que volver a ir en busca de otro de nuevo.