Los padres de Luna eran muy aficionados a las maratones. Se preparaban a conciencia durante todo el año para poder correr una cada mes de enero con los compañeros de su club de atletismo. Un día, intrigada, Luna quiso saber por qué se llamaba así a esas carreras, de dónde venía el término “maratón”. Así que se fue a la biblioteca y se puso a investigar.
La bibliotecaria le recomendó un libro en que se narraba la batalla de Maratón. Luna leyó que esta tuvo lugar entre los griegos y persas en Maratón, una gran llanura a 40 kilómetros al noreste de Atenas, en Grecia. Se libró entre las fuerzas griegas y sus aliados bajo el mando de Milcíades. Por su parte, a las fuerzas persas las dirigía Darío I y dos comandantes: Datis y Artafernes.
La victoria de los griegos sobre los persas fue muy importante para la evolución de la historia militar griega. De hecho, esta batalla en la llanura de Maratón fue el fin de la invasión persa y permitió a los griegos convertirse en una potencia militar dominante en el Mediterráneo.
Pero, ¿cómo fue la batalla? Luna leyó que, durante varios días, los griegos y persas lucharon en los más de 3.200 metros de la amplia llanura de Maratón. En una mañana, a mediados de septiembre del 490 a. C, los griegos se dieron cuenta de que la caballería persa ya no estaba en la llanura. Milcíades ordenó por lo tanto un ataque general contra la infantería persa. Los griegos iban armados con cascos, armaduras pesadas, escudos, lanzas y espadas. Milcíades dirigió a 10.000 atenienses a la victoria frente a 20.000 persas. Cuando vieron que iban a perder, las tropas persas comenzaron a correr hacia sus barcos de guerra.
La batalla puso de manifiesto la superioridad griega. De todas formas. estos también se aprovecharon del armamento ligero de los persas y de sus débiles armaduras.
Según cuenta la leyenda, un mensajero ateniense fue enviado desde Maratón hasta Atenas para anunciar la victoria griega. Corrió los 40 kilómetros que separan la llanura de la capital griega. Al llegar, anunció la victoria de su ejército y después murió por agotamiento. Por eso ahora, a esas carreras que corren los padres de Luna y mucha más gente se las llama maratones.