Burger Queen era la mejor hamburguesería del mundo. Su dueña era una señora vegetariana con mucho talento en la cocina. Un día descubrió un ingrediente secreto que daba a sus hamburguesas un toque muy especial, tan especial que todo el mundo quería comer una y cuando lo hacía, siempre repetía. La gente empezó a decir que esta mujer era la reina de las hamburguesas, y por eso acabó llamando a su restaurante Burger Queen.
La reina de las hamburguesas ganaba mucho dinero con su hamburguesería, pero se fue haciendo cada vez más avariciosa. Para ganar más dinero, decidió echarle a sus hamburguesas más cantidad de ese ingrediente secreto que hacía que la gente quisiera comer más hamburguesas. El plan salió bien y consiguió que los clientes del Burger Queen comieran al menos tres hamburguesas al día.
Viendo que el plan funcionaba, la reina de las hamburguesas siguió echando cada vez más y más cantidad de su ingrediente secreto y los clientes empezaron a comer cada vez más y más hamburguesas.
Pero llegó un día en el que en el Burger Queen no entró ningún cliente. La reina de las hamburguesas aprovechó para cocinar más y tener reservas. Pero al día siguiente tampoco entró nadie. La reina de las hamburguesas, preocupada por su negocio y por las pérdidas que supondría tener que tirar todas las hamburguesas hechas, salió a investigar qué estaba pasando. Pero no encontró a nadie. Todos estaban en el hospital.
Así que la reina de las hamburguesas decidió coger las hamburguesas y venderlas en el hospital. Pero cuando llegó se encontró a todos los pacientes con un empacho de estómago tremendo y nadie quería probar bocado.
- ¿Y qué hago yo ahora con las hamburguesas? -dijo la dueña del Burger Queen.
- ¡Cómetelas tú! -dijo alguien.
La reina de las hamburguesas, ofendida, olvidó que era vegetariana y se comió una hamburguesa. Y luego otra, y luego otra, y luego otra…. hasta que cayó enferma.
Los médicos, al verlo, comprendieron cuál era el motivo del empacho de todos los pacientes y analizaron las hamburguesas. Descubrieron un ingrediente tóxico muy adictivo y condenaron a la reina de las hamburguesas por un delito contra la salud pública. La dueña del Burger Queen tuvo que emplear todo el dinero ganado en que pagar una gran multa y correr con los gastos médicos de todos los afectados.
Y así fue como la reina de las hamburguesas lo perdió todo por no preocuparse de lo que le pasaba a los demás y pensar sólo en su propio beneficio.