En esta ocasión vamos a conocer a los hermanos Wright. Se llamaban Wilbur y Orville y eran estadounidenses. Desde muy jóvenes sintieron pasión por lo que al final les haría pasar a la Historia: la aviación. Nacieron a finales del siglo XIX en el estado de Indiana. De los dos hermanos, Orville fue un ciclista famoso y llegó a tener una fábrica de bicicletas. De las bicis aprendieron la necesidad de tener un diseño fuerte y ligero, la importancia del equilibrio y el control y la resistencia al viento. Todo esto fue clave para el futuro desarrollo de su avión.
A los hermanos les encantaba todo lo relacionado con la mecánica. Se dedicaban a montar y desmontar aparatos para investigar acerca de su funcionamiento. En la década de 1890, empezaron a interesarse por el mundo de la aviación. Su idea era fabricar y hacer volar una aeronave que pudiese despegar por medios propios. En el año 1899 empezaron a fabricar planeadores. Construyeron tres y los probaron en un pueblo de pescadores de Carolina del Norte donde había vientos constantes que les ayudaban a volar. Además, sus playas de arena suave amortiguaban los aterrizajes.
Sin embargo, con esos primeros planeadores, probados en 1900 y 1901, los hermanos Wright no lograron suficiente elevación. Para resolver el problema, construyeron un túnel de viento y probaron 200 formas distintas de alas antes de elegir el mejor diseño para su tercer planeador.
Los hermanos Wright fabricaron su primer aeroplano con motor en 1903. En el primer vuelo, aguantó 12 segundos en el aire. Fundaron entonces su propia empresa y se hicieron conocidos en todo el mundo. Aprovecharon los beneficios que les había dado su fábrica de bicicletas.
Después de su primer aeroplano, presentaron una versión más evolucionada a la que llamaron Flyer III. Tenía un motor más potente y dos h
élices. Su creación apareció en distintos periódicos y revistas. Después aparecieron otros modelos como por ejemplo una máquina que se mantuvo volando durante media hora. Los hermanos Wright hicieron cientos de demostraciones en Europa y América y crearon la American Wright Company. A partir de los descubrimientos de estos dos hermanos, la tecnología aplicada al mundo de la aviación fue evolucionando hasta la actualidad. Si el primer aeroplano de los hermanos Wright alcanzó una velocidad de 11 km/h, hoy día el avión más rápido del mundo puede recorrer más de 3.500 kilómetros en solo una hora.