Cuentos de hermanos
Había una vez un príncipe que tenía una novia, a la que quería mucho, y a la que tenía siempre cerca. Un día el joven príncipe recibió noticia de que su padre, que vivía lejos, en ...
- Valores educativos: amor, coraje
- A partir de 4 años
Había una vez un rey y una reina muy ricos tenían todo lo que se puede desear, excepto hijos. La reina se lamentaba por ello de día y de noche por ello. Un día, después de mu...
- Valores educativos: perseverancia, aceptación
- A partir de 6 años
Había una vez una reina viuda que tenía una hija muy hermosa. Al hacerse mayor, la princesa se prometió con un príncipe de un país lejano. Llegada la época de la boda, la princesa ...
Hace mucho tiempo existió un país en el que la noche estaba siempre oscura pues jamás salía la luna ni brillaban estrellas en el firmamento. De aquel país salieron un día cuatro m...
- Valores educativos: admiración, aprendizaje
- A partir de 8 años
Maese Lezna era un hombre bajito y delgaducho que no podía estar un momento quieto. Nada le pasaba por alto, sabía hacer las cosas mejor que nadie y siempre tenía razón. Era z...
- Valores educativos: soberbia, arrogancia
- A partir de 6 años
Érase una vez un joven campesino llamado a Hans al que tío quiso encontrarle una esposa rica. El tío sentó a Hans detrás de una estufa muy caliente. Entonces le dio un vaso de lec...
- Valores educativos: avaricia
- A partir de 6 años
Había una vez un Corderillo sediento que estaba bebiendo en un arroyuelo. En esto estaba ocupado el Corderillo cuando llegó en esto un Lobo en ayunas, buscando jaleo y atraído por ...
- Valores educativos: prudencia, aprendizaje
- A partir de 4 años
ace un tiempo, cuando la gente no era tan lista como es ahora, sucedió en una pequeña ciudad el extraño acontecimiento. Un anochecer llegó de un bosque próximo una de esas grandes...
- Valores educativos: trabajo en equipo, miedo
- A partir de 6 años
Érase una vez un niño. Cada tarde, su madre le daba una taza de leche y un bollo de pan. Con ellos se iba el niño a la era. En cuanto empezaba a merendar acudía un sapo. El sapo salía de una rendija de la pared, y, metiendo la cabecita en la taza, merendaba con él. El pequeño gozaba mucho con su...
- A partir de 6 años
