Choc, el maestro chocolatero
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Choc, el maestro chocolatero

Edades:
A partir de 4 años
Choc, el maestro chocolatero La fábrica de chocolate del pastelero Choc se encontraba en una bonita aldea entre valles y montañas. En la aldea solo había 20 casas, pero el chocolatero estaba muy contento porque en todas las casas había por lo menos un niño y en algunas incluso tres o cuatro. Los niños le encantaban, porque son los que más dulce le compran y también porque son los que más lo agradecen.

En su fábrica trabajaban él y otros cuatro pasteleros, dos gnomos, un ogro y un ser no fantástico como él. Todos entusiasmados de poder elaborar todos los días el mejor chocolate. Solo fabricaban tres cosas: tartas de chocolate, bombones de chocolate y caramelos de chocolate. Por supuesto, eran las mejores tartas, los mejores bombones y caramelos que hubiéramos comido nunca.

Una tarde, un hombre del pueblo se acercó a la fábrica del maestro chocolatero Choc y esperó a que este acabara su trabajo a última hora de la tarde. Cuando Choc salió se lo encontró y le saludó. Este le respondió al saludo y le dijo:

-Choc quería hablar contigo. He estado en otro pueblo lejos de aquí y es increíble lo que hacen en sus pastelerías.

-Me alegro de que hayas disfrutado de la visita Manuel -respondió Choc.

-No Choc, yo como buen amigo quería decirte que cerca de aquí hacen cosas de chocolate muy nuevas, diferentes y al final nosotros estamos cansados de comer siempre lo mismo en todas las fiestas, cumpleaños, navidades… Si no haces algo nuevo la gente acabará yendo al pueblo de al lado a comprar.

Choc se quedó sorprendido. ¿Desde cuándo los niños estaban cansados de sus chocolates? No supo qué responder, le dio las gracias por la ayuda y se fue. Al día siguiente comentó lo sucedido con sus ayudantes y se puso nervioso. ¡Hacer algo nuevo! ¿Cómo inventar algo después de tantos años? Choc se puso a hacer chocolate y mientras pensaba y pensaba se le ocurrió que para el día de Reyes podía hacer juguetes de chocolate, reyes magos de chocolate y carbón de chocolate como algo diferente, en vez de tartas pasteles de chocolate. ¡Eso es!

El día de Reyes llegó y muchos padres y madres, niños y niñas fueron a visitar al maestro chocolatero. Hubo muchas sorpresas cuando vieron que no tenía sus magníficos bombones, ni sus dulces tartas, pero compraron lo nuevo que Choc había preparado para ellos. Se vendió todo. Choc tenía todo preparado como siempre, pero pasaban las horas y no había mucha gente a las puertas de su fábrica. ¿Qué había sucedido?

Choc, el maestro chocolateroA última hora una mujer se acercó con una niña de la mano. Choc la saludó sonriente como siempre y le preguntó:

-Buenos días. ¿Sabe si ha sucedido algo en la aldea? Es que hoy apenas ha venido gente a comprar mis pasteles y figuras y siempre suele estar la fábrica llena.

-Hola Choc, lo siento mucho, a mi hija le han gustado tus pasteles, pero la verdad es que como no tenías tus tartas, tus bombones y tus caramelos la mayoría de los adultos y niños han preferido comer chuches o bizcocho de sus casas.

Choc sorprendido vendió esos pasteles de chocolate, pero fueron los últimos. Al día siguiente el maestro chocolatero volvió a hacer sus tartas, sus bombones y sus caramelos. Ese día entendió que cada fábrica hace algo especial y si sus chocolates funcionan lo mejor es no cambiarlos.
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